Resistir, exigir derechos y preservar la memoria ancestral son los pilares fundamentales de un grupo intergeneracional, ecuménico y diverso que ha dejado una huella inspiradora. Desde 2016, este colectivo ha combinado su talento y creatividad para dar vida a cinco cautivadoras obras de teatro.
En medio de la violencia y el conflicto armado, un grupo de teatristas se ha unido con la finalidad de promover la paz y transformar su entorno en Buenaventura. Conocidos en sus inicios como Teatro por la Paz Guasá, gracias a su proceso de crecimiento artístico se han constituido como Asociación Arte y Memoria Guasá. Estos artistas utilizan el poder del teatro para dar voz a aquellos que han sido silenciados y contar las historias que han sido relegadas al olvido.
La historia de Teatro por la Paz Guasá se remonta a la experiencia del padre Jhon Reyna, antiguo director de la Pastoral Social de Buenaventura. Inspirado por una iniciativa de teatro por la paz en Tumaco, el padre Reyna decidió replicar esta experiencia en Buenaventura. Así nació en 2016 el Teatro por la Paz Guasá.
El nombre del grupo, “Guasá“, hace referencia a un instrumento musical tradicional del Pacífico colombiano que contiene numerosas semillas. La metáfora de las semillas unidas en un solo instrumento que produce un sonido poderoso refleja la esencia del grupo y su impacto en la comunidad.

Testimonios que dan voz a la comunidad
La construcción de las obras de teatro se basa en la creación colectiva, en la que se incorporan las experiencias personales de los integrantes y las vivencias de la comunidad. Inspirados en las técnicas del maestro Augusto Boal y utilizando el Teatro del Oprimido, el grupo Guasá logra liberar las emociones y dolores que existen en la comunidad gracias a la recopilación de testimonios y la narración de historias personales, lo cual crea un espacio de solidaridad y genera un impacto transformador.
Las obras abordan temas fundamentales como la resistencia, la exigencia de derechos y la preservación de la memoria ancestral. Estas representaciones teatrales reflejan la cruda realidad de Buenaventura, una realidad marcada por la violencia y el miedo. Sin embargo, también buscan rescatar momentos de alegría y recuerdos de tiempos pasados, con el objetivo de transmitir un mensaje de esperanza y empoderamiento a la audiencia. A través de juegos y rituales ancestrales, el grupo logra hablar y liberarse, creando un espacio de reflexión y transformación para la comunidad.
“No podemos normalizar esa violencia, la gente debe saber que hay asesinatos, desmembramientos y fosas comunes. Eso no es normal, no se puede normalizar, y nosotros debemos denunciarlo. Siempre estamos denunciando todas estas problemáticas socio-políticas“
Tatiana Angulo Mosquera

No normalizar la violencia
La violencia es una realidad latente en Buenaventura. Tatiana Angulo Mosquera, coordinadora del grupo, recuerda momentos en los que su barrio se vio envuelto en balaceras y la impotencia de tener que resguardarse junto a su hija. A pesar de las dificultades, ella y su grupo se niegan a resignarse. El teatro se ha convertido en una herramienta poderosa para alzar la voz y denunciar las problemáticas socio-políticas que enfrentan diariamente. “En Buenaventura siempre la violencia es fuerte. Y aunque no es lo que más nos impulsa, es una de las realidades con las que lidiamos. No podemos normalizar esa violencia, la gente debe saber que hay asesinatos, desmembramientos y fosas comunes. Eso no es normal, no se puede normalizar, y nosotros debemos denunciarlo. Siempre estamos denunciando todas estas problemáticas socio-políticas“, enfatiza Tatiana.
En fotos: Guasá, el grupo de teatro que se opone a la normalización de la violencia en Buenaventura
Arte y Memoria Guasá se ha convertido en un actor importante en la lucha contra la normalización de la violencia y en la denuncia de las violaciones de derechos humanos que ocurren en Buenaventura. Teatro por la Paz Guasá continúa su lucha por la paz y la transformación de su comunidad, a través del arte, el juego y el teatro, creando un espacio de diálogo, reflexión y construcción de un camino hacia un futuro más esperanzador para Buenaventura. porque “Buenaventura sí existe”.